miércoles, 24 de agosto de 2011

Hasta el fin

Y estoy aquí, aquí para quererte, para decirte, para abrazarte.
Todas las noches siento, a veces presiento, te miro y te beso, tan dulce, tan intenso, siempre juntos viviendo y danzando como las hojas con el viento.

Entre todas las voces dormidas y sentimientos a flor de piel, te amo cada día desde la noche hasta el amanecer, sin saber por que, me doblegue en tu esencia, en tu alma transparente cariñosa y amena. Me encandilo con tu locura que es la mía, que no guarda mentiras, que no teje engaños.
Guardarme en tu corazón dentro de tu pecho resonante, átame.

Con ganas de que sea siempre, hasta siempre, hasta el fin.
Te amo.

lunes, 22 de agosto de 2011

Sin aires turbulentos

Despertar y recordar como eran los días soleados, como era todo en los pocos días lejanos.
Florecer, desde los últimos momentos para revivir y renacer, desde el sol sin aires turbulentos.
Vivir, para amar en todos los segundos, crecer en cada pestañazo vació y olvidar las penas remotas, las tristezas lánguidas, renacer en todos los espacios, y evitar morir en todas las horas.

domingo, 21 de agosto de 2011

Talca

Sin saber compre un boleto y subí, al no conocer sentía que me demoraba mucho en llegar, llegue y mi impresión fue es antiguo y polvoriento, como un pueblito lejos de la capital.

Pero algo me movia ahi, el amor me estremecio cuando solo baje de un bus. La ciudad desconocida de nombre trueno me acogió y me dio sus brazos, el me preguntaba si me gustaba su ciudad, su vida... y yo, respiraba una felicidad incalculable y un amor palpable en cada calle que caminábamos.

Camine y camine, llegamos a casa, cerré los ojos y respire menta, hogar, amor y dulzura.
Pasaron los días y los colores, entre mis viajes que no han parado, sigo volviendo a mi felicidad lejos, que me alegro de haberla encontrado.

La ciudad de los truenos, con mi amado, me enamoro desde sus completos, ríos, familia que me ha dado, a esta santiaguina desconocida de corazón adoptado a un sur lleno de bosques, amor y vida.

Esta historia no termina, sigo esperando muchas veces mas bajar de ese bus, sigo esperando amar y caminar entre tus calles, ciudad del sur, truenos, cordillera, sol y corazón.

A veces.

Entre estupideces sigo viviendo, entre boleros sigo escuchando partes, de las partes, risas y sonrisas. Entre el cariño me abstengo ya que parte no me siento, de acá cerca de esta gran ciudad no me hallo, no hay oportunidad de correr al terminal y viajar horas abrazando el amor y el cariño.
Entre los segundos posmenores de las noches, consigo la vida un poco arriba feliz abajo y apretable dentro. Mas de un poema de siempre, es un prosa que siento, bien dentro como nada muy lejos de lo que dice y ve la gente a veces, que siente posiblemente.
Entre estupideces me despido, a nadie dicen que nadie lee, a nadie que todos niegan a todos que poco sienten, a veces.